Este verano he sufrido de nuevo una de las temidas cistitis. Hacía casi dos años que no tenía una infección de orina, aunque no había olvidado el intenso dolor y la sensación de quemazón que se sufre. Estaba de vacaciones (y fuera de España) cuando la tuve, así que no pude alimentarme de la manera adecuada para ayudar a su tratamiento y prevención. Pero no quería desaprovechar la oportunidad de enfocar la infección de orina desde una perspectiva dietoterápica, ya que la prevención a través de una dieta adecuada es clave para aquellas mujeres que sufren cistitis recurrentes o crónicas.
La cistitis es un proceso inflamatorio de la vejiga uretral producida por gérmenes como el Escherichia Coli y tiene mayor incidencia en las mujeres que en los hombres. En el pasado, tanto mi madre como yo sufríamos cistitis a menudo y, en ninguna ocasión, los médicos nos han ofrecido un enfoque diferente a una receta de antibióticos (que destruyen además la flora intestinal y bacteriana y en muchas ocasiones provocan Candida después de la cistitis). Además, les preguntábamos que cuál era la mejor forma de evitar otra cistitis y se limitaban a decirnos que no se podía hacer nada, que era una cosa común en mujeres y ya está.
Ante esta perspectiva y la desesperación y el miedo de volver a sufrir otra, nadie nos dijo nunca que una dieta alcalina y el consumo de ciertos alimentos podrían mejorar nuestra salud genitourinaria y ayudarnos a tratar y prevenir la cistitis.
Hoy quiero hablaros de aquellos nutrientes y alimentos que son fundamentales en una dieta para el tratamiento y la prevención de la cistitis.
-
Alcalinizar la orina.
El equilibrio ácido-básico del organismo está determinado por los alimentos que consumimos. Algunos alimentos son alcalinizantes y otros acidificantes de la orina, por lo que están directamente relacionados con la formación de cálculos renales o la cistitis. Los alimentos acidificantes son los productos animales, los cereales (trigo, avena y mijo), las legumbres, el azúcar blanco, los frutos oleaginosos, el café, el té, el cacao y el vino, entre otros. Y entre los alimentos alcalinizantes encontramos las hortalizas de colores, las verduras de hoja verde, los plátanos, las patatas, los frutos secos y el aguacate, entre otros.
Por lo que mantener una dieta alcalina, en general, nos ayuda a prevenir la cistitis.
-
Aumentar el volumen de líquidos que se ingieren.
Haremos la orina más fluida, diminuimos su acidez y será menos irritante para las vías urinarias.
-
Tomar zumo de arándanos rojos o azules, 3 vasos diarios durante 3 semanas.
CUIDADO. Puede parecer que lo más sencillo es pasarnos por el super y comprar zumo de arándanos de brick, pero debemos tener en cuenta de que ese zumo envasado apenas tiene una concentración ridícula de zumo de arándanos y es rico en azúcar. Por lo tanto, contraproducente para el tratamiento.
-
Consumir semillas de calabaza.
Contienen una sustancia llamada cucurbitina y ayuda a desinflamar la orina.
-
Tomar frutas cítricas
Ya que son alcalinizantes: limón, naranja, mandarina y pomelo.
Es decir, una dieta rica en alimentos vegetales, que aporte las calorías necesarias e incluya más alimentos ricos en hidratos de carbono y grasas saludables, y menos proteínas. El vegetarianismo es una buena opción dietética para casos recurrentes.
