¡Por fin puedo compartir con vosotros esta receta! No penséis que no quería hacerlo… solo que me ha costado un poquito encontrar el hueco para subirla. ¡Pero aquí está! Porque realmente es un caprichazo saludable que tenéis que probar. No lleva ningún edulcorante añadido, ni siquiera de los más naturales, y, por supuesto, es vegana y sin gluten. Perfecta para los cumples de los niños o para personas con intolerancias. 

carrot-cake-1

carrot-cake-2

 ¡Por cierto! Si tienes algún evento a la vista o te apetece probar esta tarta o alguna otra crudivegana visita RAWKERY, un proyecto que estoy retomando para preparar tartas crudiveganas bajo demanda y también mesas dulces para cumpleaños y eventos, ¡totalmente a medida y personal! (Solo en Madrid 😉 Y si te apetece aprender recetas como esta… échale un ojo a las próximas fechas de los RETIROS de cocina vegana que estamos preparando para este verano en The Green Fuel Home. ¡Me encantará conocerte!

Bueno ya te dejo con la receta. De verdad deseo que la disfrutes muchísimo y la compartas con los que más quieres. Aunque si la preparas seguro que vuela antes de que te des ni cuenta, así que antes de nada prueba un buen trozo!!

Tarta de zanahoria RAW

Tarta de zanahoria RAW

Si te apasionan las zanahorias (y sino también...) tienes que probar esta versión de la Carrot Cake. Sana sanísima, refrescante, llena de color y de nutrientes. El caprichazo perfecto para cuidarse.

Ingredientes

  • Para la capa de zanahoria:
  • 700-800 gr de pulpa de zanahoria (¡bébete el zumo!)
  • 100 gr de pasas
  • 8 dátiles deshuesados
  • 1 rodaja de jengibre fresco
  • 1 rodaja de vaina de vainilla fresca
  • 2 cucharadas de aceite de coco
  • 200 gr de nueces
  • Para el frosting:
  • 400 gr de anacardos (remojados previamente)
  • 1 cucharada de aceite de coco
  • 1/2 T de bebida vegetal de almendras
  • 1 cucharada de zumo de limón

Instrucciones

  1. Trituramos la zanahoria con una batidora potente y colamos con una bolsa de filtrado el exceso de líquido (¡Bébete el zumo resultante!). De esta forma nos quedaremos con la pulpa de la zanahoria, que es la parte que utilizaremos para la tarta.
  2. En un procesador de alimentos añadimos los dátiles, el jengibre, la vainilla, las pasas y el aceite de coco y batimos hasta obtener una masa. Por último añadimos las nueces y la pulpa de la zanahoria y batimos de nuevo hasta que todo quede bien incorporado.
  3. Colocamos la mezcla en el molde. Puede ser un molde de tarta o de magdalenas. Reservamos la mezcla en la nevera mientras preparamos el frosting.
  4. Para el frosting ponemos anacardos, el aceite de coco, la bebida vegetal de almendras y el zumo de limón en un procesador de alimentos y batimos hasta obtener una masa sin grumos, muy cremosa.
  5. Colocamos la mezcla encima de la base, en el molde que hayamos elegido.
  6. Decoramos la tarta con nueces o con un poco de chocolate por encima.
  7. Enfriamos al menos 4 horas en el congelador y la sacamos 2 horas antes de consumir a la nevera.

Notas:

Todos los ingredientes deben estar a temperatura ambiente para que el aceite de coco no se quede sólido en mitad de la mezcla. Recuerda que este aceite estará líquido a temperatura ambiente pero con el frío se solidifica. Si no utilizas dátiles Medjool o tus dátiles tienen algo de tiempo y están un poco duros, ponlos en remojo durante una hora con agua caliente para ablandarlos. ¡Será mucho más fácil batir! En este caso no remojamos los anacardos para activarlos, ya que a pesar de ser crudos para quitarles la cáscara los someten a un proceso en el que aumenta la temperatura hasta 70 grados, así que el remojado es simplemente para que queden más blanditos, sean más fáciles de batir y la mezcla quede más cremosa. Con tenerlos 2 horas a remojo será suficiente aunque yo prefiero tenerlos toda la noche a remojo para que sean más fáciles de batir.

https://amandaortiga.com/2017/04/27/tarta-raw-zanahoria/

RAWKERY (1)

descubre-la-experiencia

Imprimir