Si me sigues por Instagram ya te habrás dado cuenta de que me fascinan los guisos rápidos de legumbres. Utilizo muchos elementos de mi Batch cooking para preparar en 15 minutos unos garbanzos estofados o unas judías rojas super cremosas. En este post quiero contarte algunos de mis trucos para conseguir bases de guisos espectaculares en muy poco tiempo. Repasaremos mis ingredientes favoritos e imprescindibles para conseguir un sabor profundo y elaborado. 

1.Las verduras asadas.

Hornea una bandeja de verduras que te sirva para comenzar guisos mucho más rápido y conseguir sabores más intensos. Mis básicos son: las cebollas/chalotas asadas, que nos ahorran mucho tiempo porque no hay que pochar la cebolla al comienzo del guiso; los tomates asados, perfectos para hacer una salsa de tomate que puede ser la base de un guiso si nos apetece; las raíces horneadas, zanahoria y remolacha, perfectas para trocear y añadir a un guiso; y calabaza, patata o boniato asados, que si los dejamos bien tiernos se acabarán deshaciendo y aportando mucha cremosidad y cuerpo al guiso. 

2. Mantequillas de frutos secos

Añadir 2 cucharadas de mantequilla de cacahuetes/almendras/anacardos/pipas es uno de mis trucos favoritos para conseguir un extra de cremosidad. Si te animas quedará un guiso con mucha personalidad, original y diferente.

3. Los básicos del umami

Tras el paso de Mike de Umami Plantbased por la Escuela, sin duda no pueden faltar en esta lista ingredientes con sabor umami, el quinto sabor. Lo traducen como «delicioso» y lo encontramos en la pasta concentrada de tomate (buenísima opción también para tener en despensa por si no tenemos asados), miso (mi favorito es el Shiro Miso) y tamari (que utilizaremos en vez de sal). Todos para dar un extra de sabor a cualquier sopa o guiso. 

4. Caldo de verduras

No es lo mismo hacer un guiso con agua que con un rico caldo de verduras. Le dará más matices de sabor al plato y además será más nutritivo. Puede ser casero (yo lo guardo congelado en cubitos) o de brick, ecológico y de buena calidad. 

5. Especias

Las especias son las otras grandes aliadas para dar sabor y poder disfrutar de más variedad de sabores. Las lentejas yo las suelo hacer con Garam Masala. Otros días me apetece un toque más mediterráneo y utilizo ajo en polvo, orégano, albahaca o pimienta negra. El jengibre (fresco o en polvo), la cúrcuma o el curry son otros básicos de mi despensa. 

Pero, ¿cómo lo hago?

Siempre sigo más o menos un mismo procedimiento, utilizando lo que tengo en cada momento en la nevera y despensa. Elijo una legumbre (ya cocida) y también las verduras asadas que tenga del Batch Cooking. Troceo las verduras y las añado a una olla con un poco de aceite de oliva virgen extra. También se pueden añadir verduras en crudo que se cocinen con cierta rapidez en el caldo como calabacín o setas. Cubro con caldo de verduras y añado algún elemento que sirva de espesante (mantecas de frutos secos, pasta de tomate, miso o boniato/calabaza asados…, dependiendo del día elijo un par o quizás tres). Incorporo la legumbre cocida y dejo cocer a fuego medio 10 minutos para que todos los sabores queden bien integrados. Por último pruebo y ajusto de sal y añado las especias que me apetezcan ese día. 

En la foto tenéis un ejemplo de guiso de garbanzos con mantequilla de cacahuete y pipas de girasol, boniato asado, tomates asados, cebollas asadas y un toque picante. 

Espero que os haya sido útil el post y que practiquéis en casa. Las legumbres son una fuente de proteína excelente en dietas vegetales, muy saludables y nutritivas y comerlas así es todo un placer.

¡Nos vemos en la Escuela!